Principales protagonistas históricos:

Gaspar Melchor de Jovellanos (1744-1811): en la infancia fue Parín, de Gasparín. Jovino será su nombre poético.

Cabarrús (1752-1810): economista y político. Gran amigo de Jovellanos en los años 80 y 90. Cabarrús fue contrario al ingreso de las mujeres en la Matritense, frente a don Gaspar que estaba a favor. El exilio a partir de 1790 se desencadena a consecuencia de la defensa que hace de su amigo Cabarrús ante la Corte. Afrancesado a partir de 1808.

Campomanes (1723-1802): político, economista e ilustrado, muy admirado por Jovellanos. Como poderoso político y fiscal del Consejo de Castilla alienta la carrera de Jovellanos. Mantienen contactos asiduos en los años 80 y a partir de 1790 se enfría su amistad a causa del affaire Cabarrús.

Carlos III (1716-1788): Jovino pronuncia el Elogio de Carlos III, en 1788.

Carlos IV (1748-1819) y María Luisa de Parma (1751-1819): reyes de España, 1788-1808. Los años de persecución de nuestro ilustrado, entre 1790 y 1808, coinciden con su reinado. La reina demuestra una clara animadversión hacia el reformador que era Jovellanos.

J.A. Ceán Bermúdez (1749-1829): historiador del arte. Acompaña como paje y secretario a don Gaspar, desde los años de Alcalá hasta los 80. Muy buenos amigos, fue su primer gran biógrafo.

Fernando VII (1784-1833): Libera en abril de 1808 a Jovellanos, al convertirse en rey de España.

Francisco de Paula Jovellanos (1743-1798): capitán de fragata. Ayuda en la fundación del Real Instituto Asturiano, donando el primer edificio del instituto: la Casona; Gaspar le nombra director del instituto.

Josefa Jovellanos (1745-1807): ayuda a su hermano en el comienzo de su carrera de juez. Reconocida escritora de poesía en asturiano, además de destacada filántropa, profesa como monja agustina recoleta desde 1794. Ambos hermanos mantienen  una fuerte unión y amistad.

Godoy (1767-1851): favorito de Carlos IV y María Luisa entre 1792 y 1808, aunque entre 1798 y 1801 pasa a un segundo plano. Nombra a Jovellanos embajador en Rusia y a los pocos días ministro de Gracia y Justicia, en 1797. Sin embargo, el encarcelamiento de Jovellanos también se produce durante su gran influencia en el gobierno.

Goya (1746-1828): comparten ambos amigos el ingreso en la Academia de Bellas Artes. Don Gaspar le encomienda la realización de pinturas oficiales. Goya le retrata hacia 1782 como consejero de órdenes. En 1798 vuelve a pintarle como ministro de Gracia y Justicia.

Lord Holland (1773-1840): político inglés e hispanista. En su temprana juventud viaja a España y se hace amigo de Jovellanos, por quien confiesa fascinación en adelante. En la guerra de la Independencia vuelve a España con lady Holland y toma contacto con su admirado amigo; de esa época se conserva la correspondencia entre ambos, de gran valor para conocer sus ideas políticas.

Meléndez Valdés (1754-1817): poeta y político. Estudiante en Salamanca empieza a admirar a Jovino, joven juez de Sevilla, de quien ya se oye hablar en el mundo literario. Ambos se harán grandes amigos. Él y otros literatos seguirán de cerca las ideas reformistas poéticas y políticas de Jovellanos.

Napoleón Bonaparte (1769-1821): general, cónsul en 1799 y emperador de los franceses en 1804. En 1808 invade España y nombra a Jovellanos ministro del Interior, cargo que declina, para unirse al bando nacional.

Olavide (1725-1803): político español. Cuando el joven juez accede a su primer destino en 1768, don Pablo de Olavide, Intendente de Sevilla, es el máximo representante del monarca en Andalucía. En su famosa tertulia, Jovellanos se da a conocer como literato.